Después de mucho tiempo sin mostrarme en público decidí salir a dar una vuelta. Bajé al parque esperando que hubiese cambiado aunque fuese solo un poco, fue algo decepcionante comprobar que todo seguía exactamente igual.
Tenía muy presente que no había cumplido mi promesa de marcharme y desde entonces habían pasado varios meses. Mi estancia no se alargaría mucho más.
Me senté en uno de los bancos y contuve un suspiro. En momentos como aquellos me sentía totalmente desencantado con mi no-vida.