Un nuevo huésped

Entré en el salón seguida de Cloud y de Cavill. Me senté en uno de los sillones y les invité ha hacer lo mismo. Dónde estaba Vania.

Me sente en uno de los sillones que habia alli

Negué con la cabeza incapaz de borrar la sonrisa nerviosa que tenia dibujada en la cara. No sabia qué decir.
-¿De dónde eres Cavill?-fue lo primero que se me ocurrió decir.

-No, no quiero gracias- mire a Amelia- me gustaria poder decirtelo, pero no lo recuerdo lo unico que se es mi nombre gracias a esta pulsera- dije remangandome y mostrandole la pulsera

Me incliné un poco hacia delante para ver mejor la pulsera. Caleb no era el único que no recordaba su pasado por lo visto.

-Mas de una vez, pero por mas que lo intento, no lo recuerdo, pero vamos, tampoco es que sea lo mas importante en mi vida, yo creo que con el tiempo recordare algo-

Consideraba que tenia mucha suerte, mi pasado no era digno de recordar y aun asi no lo habia olvidado.
-No te desanimes, todo llega antes o despues.-sonreí.-¿Qué te trae por aqui? ¿Vienes a quedarte?.-quise saber.

Sonre y volvi a colocarme la pulsera

-Paseaba y vi esta masion a lo lejos, si me gustaria quedarme, por una larga temporada-

Fulminé a Cloud con la mirada por dejarme tirada y me volví hacia Cavill. Sonreí con una disculpa pintada en la cara.
-Lo siento, no soy especialmente habladora.-dije.

-No te preocupes, seguro que tienes otras virtudes, dije sonriendo- bueno ¿tu llevas mucho tiempo aqui?-

-Una eternidad.-bromeé.-Pero si, llevo algún tiempo aqui, me gusta esto.- respondí recorriendo la estancia con la mirada.
-Todos son agradables, seguro que te caen bien.- anadí.

-asi esta mejor-dije mirandola con complicidad

-Eres bastante linda,¿sabes?, ¿no hay nadie aqui a quien pertenezca tu corazon?-

Sonreí azorada y me revolví un poco en el sofá tratando de ponerme mas cómoda.
-Gracias. No, no hay nadie.- respondí.

Sonrei

"Que mona, le da vergüenza,parece una chica dulce"pense y sonrei

Me sente en el mismo sofa que ella

Me senté ladeada para poder mirarle. Me habia descolocado un poco su pregunta sobre si mi corazón le pertenecia a alguien.
-¿Puedo saber el motivo de tu curiosidad sobre si quiero a alguien?.-pregunté en apariencia tranquila, aunque por dentro seguía un poco ruborizada por el piropo.

-Porque me estraña que alguien tan linda como vos, no tengo a alguien que la abrace por las noches y que le proteja-

Que gracia, yo me hacia la misma pregunta, por qué no tenia a nadie así, un chico grandote como un armario pero cariñoso y tierno, vamos mi chico ideal.
-Ya ves, no siempre las chicas lindas estan tan bien como tú has dicho.-sonreí.

Me acerque un opoco mas a ella con disimulo

-Seguro que pronto encontraras a alguien-

Suspiré.
-Ojalá.-murmuré.-Me encantaria eso.- añadí. Yo seguia imaginando a mi cjico perfecto, por desgracia un chico sin rostro aun y no me di cuenta de su acercamiento.

-Ya lo veras, solo tienes que dejar, al tiempo-dije sonriendo

-Pues que mal, porque soy un poco impaciente.-respondí mirando al frente.