A la caza del cazador

-Pues hacedlo-le respondí.
Intuí que pensaba en algo y me puse en guardia instintivamente.

Al salir del centro Vania,me dio la oportunidad de simbolizarle un poco la idea a Gareth.
Alce la ceja y con el indice le marque un 1 y luego con las manos una X.
Esperaba que lo entendiera,tampoco podia dalre muchas mas pistas delante de Vania.

Coji impulso,con mi brazo izquierdo coji el brazo derecho de Gareth y nos lanzamos contra la Matriarca.(La coji para asi igualar nuestra velocidad)
Gareth estaba dispuesta atacar,la solté,yo me deslice por el suelo.

Justo llegar delante de nuestra oponente,Gareth freno su carrera para que yo dando un golpe en el suelo,saltase y me preparara para soltar un zarpazo.

Mi plan solo funcionaria si distraia lo suficientea a Vania.

Cuando llegue a la distancia adecuada encoji las piernas y asi Gareth atacaria con toda su velocidad por debajo,que era el unico hueco que Vania no podia ver en ese momento,ya que yo tapaba su vision.




**(disculpad pero estare una semana fuera,continuad con el relato,como si yo estuviera ^^. Gracias)**

-Abusas del teletransporte, Vania.-observé.

-Los vampiros mayores los borrarían del mapa con un movimiento de la mano.

-Lástima que el espectáculo deje un mal sabor de boca.

-Exacto. Esperaba que, como mínimo, te llevases un pequeño zarpazo pero tu abuso de poder lo ha hecho totalmente imposible. Aunque también me hubiese gustado ver algún hueso roto.

-Resulta tentador. Sobretodo el sonido de tu columna vertebral al romperse.-respondí pensativo.-Pero no me apetece despertar al demonio que duerme en el dormitorio principal.

Mostré los colmillos por respuesta.
-¿Segura? ¿Ni siquiera cuando lances un SOS mental?-inquirí con palabras afiladas como puñales.-No, gracias. No me apetece sufrir un molestísimo dolor de cabeza.

-No hace falta que lo digas. Sé muy bien a qué se dedicaba en esos momentos.-repliqué.-Aún así no.

Me reí de ella.
-No niego que le haría un favor a muchos, pero no me interesa mancharme las manos.-contesté negando con una mano.-Y deja de ponerte en evidencia, parece que estes loca.

Le dediqué un rápido asentimiento a Irina y bajé del árbol. Permanecí en completo silencio hasta que dejé de notar la presencia de los otros tres vampiros.
-Te pediría que dejases de usarle como arma. Me repugna oir su nombre salir de tu boca y me entristece que siempre le utilices para atacarme. Si no tienes otra cosa mejor que usar... limítate a callarte.-hablé con total serenidad pero la advertencia iba impresa en cada una de mis palabras.
-Buenas noches.-añadí dándome la vuelta para regresar a la mansión.